Cómo limpiar el calzado de esparto

Ahora que se acaba el verano toca limpiar el calzado que más nos hemos puesto. Teniendo en cuenta su comodidad y versatilidad, probablemente los zapatos a los que más uso les hayamos dado sean nuestras alpargatas y cuñas de yute. Pero es entonces cuando nos asalta a la duda. ¿Cómo debo lavarlas para que no se dañe el esparto? En este post vamos a darte las claves para que siempre tengas tus Manolett’s perfectas.

Qué no hacer para limpiar calzado de esparto

En primer lugar, necesitas saber lo que nunca debes hacer para limpiar el calzado de esparto. Aunque se trate de una de una de nuestras técnicas de limpieza más comunes, nunca metas tus alpargatas en la lavadora.

Cuando el calzado de esparto se moja y aún más, cuando se empapa, sufre daños irreparables. Cuando la suela de nuestras alpargatas o cuñas absorbe agua en exceso, el esparto se hincha y se deshace. El resultado será una zapatilla que poco a poco va perdiendo hilos y, por tanto, consistencia.

Además de dañar la calidad e incluso se estropearla sin solución, tendremos como resultado un calzado que desprende mal olor. Al igual que ocurre con las prendas de ropa que pasan demasiado tiempo húmedas, la suela de esparto no tiene la capacidad de secado que otros materiales. Sobre todo teniendo en cuenta que esta parte de las alpargatas o cuñas viene trenzada. Por lo que existen zonas que acumularán humedad sin terminar de secarse como es debido.

Cómo limpiar la lona

A la hora de limpiar alpargatas o cuñas con suela de esparto seguiremos dos técnicas diferentes para cada una de sus partes. En cualquiera de los casos, lo primero que debes hacer es colocar dentro un trapo de microfibra. De esta manera, absorberá el agua evitando que impregne la suela.

En el caso de que la lona sea de blanca, como en las tan de moda alpargatas de novia, el bicarbonato sódico será nuestro mejor aliado contra las manchas. Mézclalo en un recipiente con un poco de vinagre. Utilizando un cepillo para uñas, frota las manchas con la mezcla. No solo desaparecerán las manchas, sino que la lona recuperará su color blanco.

Si la lona es de color, podemos utilizar un jabón tradicional en pastilla o amoniaco. Para frotar, usaremos un cepillo pequeño, ya sea de uñas o de dientes. Para reblandecer el jabón, lo ideal es mojarlo con anterioridad. Pasamos el cepillo por la pastilla de jabón, arañándola. Después, frotamos la lona con el cepillo con movimientos circulares. Para eliminar los restos de jabón, pasamos un trapo de microfibra húmedo.

En cualquiera de los casos, no empapes la lona ni pongas el calzado bajo el grifo. Siempre que necesites enjuagarla, emplea un trapo y repite las veces que sean necesarias.

Cómo limpiar la suela de esparto

Para limpiar la suela de esparto de nuestras sandalias o cuñas seguiremos el mismo procedimiento que con la lona de colores. La única diferencia es que antes de frotar con jabón debemos pasar un cepillo para eliminar el polvo.

Si observamos que existen residuos, como barro, podemos eliminarlos utilizando un cepillo de mayor dureza. Una vez hecho esto, aplicaremos el jabón ayudándolos de un trapo húmedo para enjuagar.

Por último, cuando ya hayamos eliminado toda la suciedad de nuestro calzado de esparto, lo pondremos a secar al aire libre. Asegúrate de que los colocas en una zona en la que no reciban la acción directa del sol para evitar que se produzcan daños.  ¡Tus alpargatas o cuñas volverán a estar como nuevas!